Un clásico casí siempre es el primero de los barrancos, entre otras cosas porque mas entrada la primavera puede quedarse sin agua y aunque nuestras informaciones eran de que llevaba mucha agua, la realidad fue otra pues no llevaba tanta como cabria espera. Se trata del barranco de Poyatos, en el río Escabas, en la Serrania de Cuenca. Tampoco fuimos los únicos pues eras tres grupos que en total sumamos aproximadamente 20 personas, pero no nos molestamos ni en los rapeles. Este barranco es de dificultad media, tiene entre seis y siete rapeles, algún salto un par de toboganes, dos sectores en los que es estrecha y una zona intermedia en la que se va practicamente andando por poca agua, entre losas de piedra resbaladiza por los musgos, otro estrechamiento final con un salto o tobogan y un último rapel y para finalizar el salto de meta. Realizado por Carina, Mar, Maria Angeles, Juanito y el que esto escribe Rafita.
Importante: En dos rapeles han quitado las chapas lo cual relentiza el descenso.
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